domingo, 10 de enero de 2010

Rosana Malaneschii- La poesía como hipótesis

Quisiera vincular lo joven con la capacidad de prefigurar el futuro. En los 60’s Margaret Mead dividió las sociedades en posfigurativas, cofigurativas y prefigurativas. Las prefigurativas son sociedades sometidas a procesos de cambio tan intensos y permanentes que se ven lanzadas hacia adelante. En ellas lo que aún no fue debe rastrearse en tiempo presente, por eso se habla de prefigurar, porque es necesario anticipar el futuro, moverse con la tendencia. La idea enfatiza el cambio y su aceleración y que los jóvenes son los que prefiguran por su necesidad de insertarse en lo nuevo.

La pregunta es por la poesía futura. Cambios hay muchos. Las TIC’s banalizaron y masificaron la producción y circulación de obras, el tema es la recepción. La encuesta de consumo cultural en el Uruguay 2009 (UDELAR, MEC) señala que se usa más Internet y se leen menos libros. Todos los niños del Ceibal están asumiendo los cambios, prefigurando el futuro. Vale preguntarse si seguirá siendo el libro impreso la mejor forma de acceder a “ser escritor”. Otro punto concerniente a la literatura es la globalización que impone autores globales, pero también debería imponer la necesidad de conectarse con lo local.

En las sociedades masificadas ser escritor - virtualidad más o menos consensuada dado que se valida con cada obra- se logra por dos vías: el éxito cuantitativo o el bien cualitativo (una 3er vía sería la mezcla de ambos). Cantidad implica vender mucho; calidad, en principio, el canon, pero; ¿cómo aplicarlo en un mundo sin centro? Y, sobre todo, ¿para qué? ¿Qué importancia tiene la poesía hoy en Uruguay? ¿En que órbita se valida? ¿Pública o privada? ¿Quién la lee? ¿Para qué editar libros? ¿A dónde llevarlos luego de publicados?

De lo antedicho se desprende que lo importante del arte futuro será en vivo o se dará en la trama urbana. La poesía joven es la que prefigura nuevas formas de acceso al hecho poético. Es una hipótesis.

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